Los vehículos eléctricos y el futuro de la automoción en el Reino Unido

El Gobierno del Reino Unido ha anunciado sus planes de prohibir la venta de coches nuevos de gasolina y diésel para 2030. Se adelantó la fecha inicial de 2040, luego se cambió a 2035 (fecha en la que se prohibirán los coches híbridos), y ahora se ha vuelto a adelantar a 2030 en un nuevo plan del gobierno para hacer frente al cambio climático.

El transporte representó un tercio de todas las emisiones de gases de efecto invernadero del Reino Unido en 2018 y los ecologistas dicen que existe una clara necesidad de reducir las emisiones de los vehículos. A pesar de un respiro inicial en el tráfico rodado durante el primer cierre del Covid-19 en la primavera de 2020, las carreteras vuelven a estar tan congestionadas como siempre. Entonces, ¿es la compra de un vehículo eléctrico (EV) la opción correcta para usted como conductor? Este artículo de opinión lo considera la cuestión desde la perspectiva de los conductores del Reino Unido:

¿Cuánto cuesta un coche eléctrico?

Es probable que el desembolso inicial para adoptar e-Mobility cueste más que un vehículo comparable con motor de combustión interna (vehículos de gasolina o diésel). Los vehículos eléctricos van desde unos 15 000 euros hasta más de 100 000 euros para los modelos de gama alta. Para reducir los costes iniciales, existe una subvención gubernamental para vehículos enchufables que reduce el precio en 3500 libras (4200 euros) y también hay una subvención de hasta 500 libras (600 euros) para costear un cargador doméstico, que significa que los consumidores podrán cargar sus vehículos en casa en lugar de depender de los puntos de recarga públicos.

¿Quién fabrica los vehículos eléctricos?

Tesla es el fabricante de vehículos eléctricos más conocido, pero la mayoría de los fabricantes han desarrollado modelos tanto PHEV (híbridos enchufables) como totalmente eléctricos en sus gamas; incluso las marcas de superdeportivos y de alto rendimiento han lanzado alternativas eléctricas. Estos vehículos eléctricos ya no son el «pariente pobre» o un simple complemento de la gama, sino que son los líderes del modelo. Fabricantes como Toyota y Ford están presionando para que sus cadenas de suministro sean neutras en la emisión de carbono para 2050. Volkswagen, propietaria de marcas como VW, Audi, Porsche, Seat y Skoda, ha aumentado su inversión prevista en tecnologías digitales y de vehículos eléctricos hasta los 73 000 millones de euros (86 000 millones de dólares) en los próximos cinco años, en un intento de mantener su liderazgo como mayor fabricante de automóviles del mundo a medida que avanzamos hacia la nueva era ecológica. Está destinando casi la mitad de su presupuesto de inversión de 150 000 millones de euros, frente a los 60 000 millones del año pasado, a la movilidad eléctrica, los coches híbridos, un sistema operativo de vehículos basado en software y tecnologías de autoconducción.

¿Cuánto cuesta su funcionamiento?

Cargar un EV resulta mucho más barato que llenar el depósito de gasolina o gasóleo. Según The AA, un coche eléctrico cuesta de media unos 2,5 € para recorrer 160 km, mientras que el equivalente en gasolina cuesta 11,60 €. No hay que pagar impuesto de circulación para los vehículos eléctricos que cuesten menos de 40 000 €. Sin embargo, los seguros son actualmente más elevados para los vehículos eléctricos debido a las limitadas opciones de reparación en comparación con los coches tradicionales.

¿Y la depreciación? Todos sabemos que el valor del vehículo disminuye en cuanto se matricula, pero ¿qué pasa con los vehículos eléctricos? Es difícil obtener una tasa de depreciación precisa de los vehículos eléctricos comprados hoy en día debido al pequeño (pero creciente) tamaño de la muestra y a la rápida evolución de la tecnología, que avanza a pasos agigantados cada año. Algunos fabricantes, como Tesla, parecen mantener bien su valor, mientras que los modelos de vehículos eléctricos más antiguos de otras marcas parecen depreciarse mucho más rápido que los vehículos de IEC. Se espera que esta situación se equilibre en los próximos años a medida que la tecnología se estabilice y sea más consistente de año en año.

¿Dónde puedo cargar mi coche?

Actualmente hay más de 30 000 puntos en el Reino Unido, en más de 11 000 localidades. Solo en 2019 se añadieron unos 10 000 puntos de recarga. Se ha realizado una importante inversión en puntos de recarga públicos, pero se reconoce que el Reino Unido necesitará gastar unos 1600 millones de libras (1900 millones de euros) en 28 000 puntos públicos más para los siete millones de vehículos eléctricos que se calcula que circularán por las carreteras en 2030. Al menos para la vida urbana, hay una red de puntos de recarga públicos que se abren en los aparcamientos, junto a los estacionamientos en la calle, y en lugares comerciales como las gasolineras BP ChargeMaster. Muchas empresas también están instalando puntos de recarga en sus instalaciones para que los empleados puedan conectarse mientras trabajan. También se está extendiendo por Europa una red de recarga rápida de 350 kW, con puntos en lugares clave como las estaciones de servicio de las autopistas para una recarga de 30 minutos durante los viajes largos.

¿Y la tecnología de las baterías?

La tecnología de las baterías sigue siendo la mayor limitación para las empresas de vehículos eléctricos, y una batería típica de coche eléctrico requiere hasta 20 libras (9 kg) de cobalto. Sin embargo, los avances en la tecnología de almacenamiento de las baterías permiten realizar trayectos más largos con una sola carga y aumentar los periodos entre recargas. 

¿Cuánto tiempo tarda en cargarse?

Depende del punto de recarga: estándar (lento), rápido y veloz.

Un punto de carga doméstico estándar funciona con una carga lenta, suponiendo una conexión nocturna que tardará entre ocho y diez horas, y está pensado para utilizare durante la noche o en un lugar de trabajo. Los cargadores rápidos tardarán entre tres y cuatro horas, piénsese en ellos como una recarga mientras se aparca para ir de compras o en un entorno más industrial, mientras que los puntos de recarga ultrarrápida tardan apenas entre 30 y 60 minutos.

¿Son respetuosos con el medio ambiente?

Al no tener emisiones por el tubo de escape, los coches eléctricos son estupendos para reducir la contaminación en las ciudades. La fabricación de un coche medio de gasolina supone la emisión de unas 5,6 toneladas de CO2, mientras que en el caso de un coche eléctrico medio esa cifra se eleva a 8,8 toneladas. Sin embargo, a lo largo de su ciclo de vida, el coche eléctrico seguiría produciendo un 20 % menos de emisiones.

La movilidad eléctrica es claramente el futuro de los vehículos. ¿Es quizás el momento de invertir en uno?