Togo se une a la revolución de la energía renovable

Togo ha lanzado su primer proyecto de energía renovable, que con 50 MW tiene capacidad para proporcionar electricidad a casi 160 000 hogares y pequeñas empresas de este país de África Occidental. La central de energía solar Sheikh Mohammed Bin Zayed, que ha entrado en funcionamiento recientemente, es ahora una de las más grandes de la región y reducirá significativamente la dependencia de los combustibles fósiles y la importación de electricidad de Togo.

Este proyecto, financiado inicialmente por el Fondo para el Desarrollo de Abu Dhabi (ADFD) y la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA), forma parte de un esfuerzo continuado por resolver el problema de la pobreza energética no solo en Togo, sino en todo el mundo. En Togo, al igual que en muchos países del continente africano, la población está creciendo y se espera que la demanda de energía casi se haya duplicado en 2040. El proyecto desarrollado por AMEA Togo Solar aseguró a través del ADFD la financiación de un préstamo que ascendía a 15 millones USD. Dado que la IRENA tiene conocimientos y experiencia en este campo, la asistencia técnica y las soluciones globales del proyecto hicieron que la central estuviera terminada antes del plazo previsto, lo cual fue un logro notable si se tiene en cuenta la paralización mundial a causa de la COVID-19. Se espera que el proyecto cree más de 800 empleos. Además, respaldará el avance de la estrategia nacional de energía limpia con grandes planes para aumentar el porcentaje de energías renovables para la electrificación en un 50 % en 2025 y al 100 % en 2030.

La responsable de Energía y Minas, Mila Aziablé, ministra delegada del presidente de la República de Togo, afirmó: «Las renovables son el núcleo de nuestros objetivos nacionales de energía y un componente vital de nuestras más amplias ambiciones de desarrollo social y crecimiento económico… Este momento es muy significativo para nuestro país. Marcan un paso positivo en nuestro recorrido a la construcción de un sistema de energía que sea inclusivo y limpio, que cree empleo y que mejore el acceso a la energía. Las renovables pueden dar forma a una era totalmente nueva y positiva para el desarrollo de Togo y estamos profundamente agradecidos a todos los que han colaborado en sacar este proyecto adelante».

Debido a las limitaciones de la infraestructura de generación de energía, Togo no es capaz de satisfacer la demanda de energía y tiene que recurrir a fuentes como la biomasa, así como a importaciones de energía desde Ghana y Nigeria para el suministro de su población en crecimiento. Se espera que la diversificación de los recursos de energía renovable mejore la seguridad de conexión de los hogares y empresas locales, a la vez que permitirá que las comunidades vecinas mejoren el acceso a servicios públicos como la educación y la atención sanitaria.

El director general de la IRENA, Francesco La Camera, aseguró: «Este es un proyecto muy importante no solo para Togo, sino para toda África Occidental… Su envergadura y velocidad de desarrollo demuestran lo que se puede lograr en la región cuando la combinación adecuada de colaboradores aúna propósitos e intenciones. África tiene un enorme potencial para la generación de energía renovable que puede suponer un mejor acceso a la energía y fiabilidad de suministro, a la vez que creará empleos y oportunidades económicas. Este es un momento de orgullo para el Fondo del Proyecto IRENA-ADFD, para todos los que han contribuido y para el pueblo de Togo».

El proyecto tendrá un papel crucial en los objetivos de la IRENA y el ADFD, que respaldan no solo a Togo, sino la rápida expansión económica de África. El desafío de las energías renovables pone el listón del éxito muy alto, pero creará mayor resiliencia y pondrá los cimientos de la sostenibilidad. Esperamos con impaciencia a conocer los pasos siguientes de este ambicioso proyecto panafricano.