Cables eléctricos: Integración de la sostenibilidad en las especificaciones para centros de datos

Los cables eléctricos son uno de los elementos unitarios de mayor volumen en un centro de datos, con miles de kilómetros instalados para sustentar las operaciones; sin embargo, a menudo se pasa por alto su papel en la infraestructura crítica.
Estos cables, con conductores de cobre o aluminio provistos de aislamiento y revestimiento de polímero (y otras capas de componentes), deben cumplir las propiedades de conductividad y rendimiento dictadas por las normas sobre cables. Para ello se necesitan materiales nuevos. En la práctica solo se utilizan cantidades limitadas de materiales reciclados —los fabricantes calculan aproximadamente un 15 % de cobre reciclado— y los avances tecnológicos harán que aumente el uso de polímeros reciclados en el futuro, pero por ahora se emplean principalmente materias primas nuevas.
Así que, dado que la fabricación conforme con las normas es una necesidad, ¿cómo se integran también las consideraciones de sostenibilidad?
Objetivo 1: Construir para que dure
Solemos decir que la decisión más sostenible que se puede tomar para cualquier proyecto, sea un centro de datos o no, se centra en las especificaciones: el cable adecuado para el trabajo adecuado. Adecue a la perfección las exigencias de rendimiento, el diseño de la instalación y los retos ambientales a los que se enfrentará el cable en funcionamiento y, a continuación, confirme mediante pruebas que cumple las normas y requisitos de conformidad pertinentes. De este modo, es menos probable que falle y haya que sustituirlo (ya sea en la fase de puesta en servicio o en cualquier momento antes de los 25-30 años de vida útil previstos), que necesite trabajos de mantenimiento correctivos o que tenga repercusiones en los sistemas y equipos más amplios. Es una obviedad: el funcionamiento sostenible evita los tiempos de inactividad.
Objetivo 2: Conocer los detalles del producto, como las emisiones de carbono incorporadas
Cualquiera que sea la fase de sostenibilidad en la que se encuentra su empresa, conocer los datos de referencia de los productos que utiliza puede ayudarle a orientar el camino a seguir. ¿Cómo puede progresar y mejorar si ni siquiera sabe en qué fase se encuentra? A medida que aumentan los requisitos de información y el cumplimiento de la legislación en materia de sostenibilidad, esto adquiere cada vez más importancia.
Las emisiones de carbono incorporadas (el total acumulado de emisiones procedentes de la extracción de materias primas minerales y materiales utilizados, la energía para la fabricación, el transporte, el envasado y otros procesos para crear un producto acabado) se miden en toneladas equivalentes de CO2 (tCO2e). Los documentos de análisis del ciclo de vida (ACV) y las declaraciones ambientales de producto (DAP), que contienen esta información a nivel de producto, son una buena manera de «comparar peras con peras».
En función de las normas aplicables a los cables y de la normativa de construcción, las especificaciones también podrían contribuir a reducir las emisiones en todo el proyecto: ¿Qué le parece, por ejemplo, utilizar cables armados enterrados directamente en lugar de canalizaciones de hormigón? ¿Qué tal unos conductores más flexibles para que el radio de curvatura sea más cerrado y facilitar así la instalación? Ahorraría tiempo en la excavación de zanjas, lo que se traduciría en menos equipos de planta y menos horas de mano de obra, y facilitaría las terminaciones. Además de centrarse en el producto, hay que tener en cuenta el panorama general.
Objetivo 3: Identificar las ventajas específicas del proveedor
Todos los proveedores hablan de sus medidas ESG, pero ¿en qué le benefician a usted? Por ejemplo, el uso de energía 100 % renovable se traduce en una reducción de las emisiones incorporadas en los productos que le suministran; las entregas en el emplazamiento por camiones alimentados con biocombustibles sostenibles HVO hacen lo mismo: una reducción de alrededor del 90 % en comparación con los motores diésel. Pero los índices de puntualidad en las entregas también pueden reportar beneficios, ya que significa que sus contratistas no tendrán que esperar después de llegar a la obra, con el equipo de la planta funcionando con generadores diésel.
Una de las grandes ventajas de los profesionales de la sostenibilidad es que reconocen que la colaboración es esencial: ninguno de nosotros puede alcanzar sus objetivos por sí solo. Su cadena de suministro está ahí para apoyarle: no deje de solicitar información y preguntar en qué le beneficia.
Objetivo 4: Intentar cuantificar el compromiso social
Es una palabra que está un poco de moda, pero incluye aspectos ESG más amplios que el mero impacto ecológico. No está asociado a productos concretos, sino a la forma en que apoya a su personal y lo que hace en la comunidad. ¿A cuántos aprendices da empleo? ¿En qué iniciativas comunitarias o benéficas participa y qué impacto tienen? ¿Qué hace para garantizar prácticas éticas en su cadena de suministro?
Cuantificarlo puede ser difícil, pero es una buena forma de hacerse una idea de los proveedores a los que recurre y de que sus propios clientes vean, más allá de la imagen corporativa, el buen trabajo que hace. El compromiso social no tiene por qué estar totalmente separado de los objetivos corporativos, sino que pretende devolver a la comunidad lo que nos ha dado y hacer lo correcto por la razón correcta.
Objetivo 5: Adecuarse a los compromisos públicos (y utilizarlo para evaluar a los demás)
¿Qué sentido tiene todo esto? ¿Cómo lo hacen los demás? Los compromisos públicos como las metas basadas en la ciencia (SBTi) y la adhesión a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) del Pacto Mundial de las Naciones Unidas proporcionan marcos en torno a los cuales puede establecer sus acciones. Parte de los requisitos para ello es informar con exactitud sobre sus emisiones de alcance 1, 2 y 3. No obstante, necesitará el apoyo de su cadena de suministro para conseguirlo.
Una vez más, la elección del proveedor puede ayudar en este proceso. En este sentido, son útiles las plataformas como Ecovadis, con criterios que abarcan el medio ambiente, la ética, las operaciones sostenibles y los derechos humanos y laborales. Una buena puntuación en este apartado puede indicar que la empresa es capaz de ayudarle en su propio camino hacia la sostenibilidad corporativa y en los requisitos específicos de su proyecto.
Objetivo 6: Considerar el final de la vida útil
Por último, en la mayoría de los casos, el centro de datos que se construye ahora se reequipará o adaptará mucho antes de que los cables eléctricos instalados lleguen al final de su vida útil operativa. También tendrá que gestionar los residuos del proceso de instalación, el embalaje y las bobinas de cable. Asegúrese de devolver estos materiales a la economía circular mediante el reciclaje. No reduce necesariamente las emisiones incorporadas a su proyecto, pero ayudará a la industria en general.
El fin todavía está por alcanzar
Seamos claros: no es un camino perfecto hacia la sostenibilidad: aún no se dispone de todas las respuestas. Se trata de hacerlo lo mejor posible hoy, antes de reaprovechar los esfuerzos actuales y mejorar en el futuro. Sí, hay limitaciones, pero también podemos hacer mucho para que la especificación, la adquisición y la instalación de cables eléctricos en los centros de datos sean más sostenibles. Al fin y al cabo, la digitalización en sí misma es un paso hacia esa solución.
Publicado en Intelligent Data Centre Magazine, el 22 de agosto de 2024